La extrema derecha estadounidense, criminal, retrógrada, racista, conspiradora, explotadora y demencial, está echando las bases del magnicidio.
Se respira un ambiente de hechos unificados que buscan crear el ambiente de otro Teatro Ford Washingtoniano en 1865 y de otra avenida Elms del 1963 dalaiano.
En pleno discurso del tradicional acto del “Congreso Speech” un legislador republicano, activista del fascismo anglosajón, interrumpió, caso nunca visto, el presidente Obama para vocearle “¡mentiroso!”
Esa falta de respecto al presidente, al recinto congresional y a la más rancia tradición USA no es un hecho aislado sino una expresión de desafío, odio, resentimiento, animadversión y preparación de la opinión pública para echar las bases del magnicidio.
Como lo fue el caso de otro hecho sin precedente pero unido por lazos magnicidas, de un general que dijo que tal o cual orden no la cumpliría porque “ese señor (el presidente Obama) no es mi comandante en Jefe”.
Como también forma parte de esa trama monstruosa el querer agudizar la crisis con Irán a raíz de las elecciones en ese país.
Pongan en el rompecabezas del ensayo magnicida la apertura del frente en Honduras, el atentado contra el vicepresidente Joe Biden (preparatorio para el verdadero atentado), la conspiración de los intereses relacionados con la salud (ayer eran los propietarios esclavistas y después los petroleros texanos).
Incluyan en el plan de crear el ambiente del magnicidio las declaraciones-denuncia contra los racistas por parte del genuino demócrata Jimmy Carter, y lo que el gran presidente denuncia que se prepara contra el presidente negro.
Añadan las manifestaciones pagadas de grupos violentos que costea esa extrema derecha que mucho tiempo había esperado para sacar las garras de la muerte contra el caso para ellos inaceptable de un negro en el despacho de sus ídolos como Jonhson, Nixon, Reagan, los Bush y otras especies.
Pero esta vez no serán tan fácil como aquel abril de un país que había salido, o estaba saliendo, de una guerra civil, ni el noviembre de un país adormecido por el ambiente magnicida que se creó ni de la falsía de la mentirosa comisión Warren.
Si tuvieran un chin más de inteligencia que de odio asesino, envidia monstruosa y criminalidad e intereses malvados, se darían cuenta que esta vez USA arderá por los 4 costados. Álvaro Arvelo EN
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